El balneario Aguas Dulces posee una extensa franja de arena que ofrece el ámbito perfecto para disfrutar el cielo, el mar, y contemplar el atardecer detrás de la silueta recortada de casas y ranchos sobre la playa.
Bajar a la playa al amanecer puede deparar momentos increíbles -y con un poco de suerte- es posible ver pasar a los delfines a la salida del sol a escasos metros de la orilla.
Al caminar hacia Valizas o hacia La Esmeralda sentirá la vibrante sensación de estar en una playa vírgen, donde solo las aves y ocasionalmente algún vacuno "playero" aparecerán para alejarse rápidamente de la presencia de los turistas.